Un policía sin demasiada experiencia se enfrenta a un caso de asesinato aparentemente sencillo. Ignora que los vecinos de la calle Armonía urden un plan que complicará mucho su investigación. Aprovecharán ésta situación para tratar de chantajear al propietario de la finca para que acepte su contra-propuesta para el desalojo del inmueble.
Ironía y surrealismo combinan acertadamente con la cotidianidad de una comunidad de vecinos que representa el acontecer actual. Los lectores podrán reconocer en cualquiera de los personajes a un vecino o, incluso, a ellos mismos.
Un desenlace sorprendente e inesperado con el que C.D. Casino sorprenderá inevitablemente al lector.
Ironía y surrealismo se combinan acertadamente con la cotidianidad de una comunidad de vecinos que representa el acontecer actual en España. Es un tema muy comercial, por la proximidad. Los lectores pueden reconocer en cualquiera de los personajes a un vecino o, incluso, a ellos mismos.
La agilidad de la lectura y la sencillez del lenguaje generan cercanía al lector. Además, la autora ha conseguido mantener la tensión argumental hasta la última página, con un final sorprendente e inesperado, que cierra la novela dejando en el lector una buena sensación.
La autora maneja de una forma excelente el factor sorpresa. Los diálogos, cortos y coloquiales, transmiten cotidianidad, incertidumbre y una realidad social avasalladora. Reflejan a la perfección la época actual de la sociedad española.
Novela negra divertida y entretenida con toques de ironía y sátira. Estilo franco y alegre, pese a ser novela negra.
El libro aborda varios problemas reales de la ciudad: el turismo masivo (del que se ha hablado mucho en los últimos meses), conversión de antiguos edificios en hoteles, la convivencia con los extranjeros, prostitución e inmigración, maltrato, discriminación social, la violencia policial y la doble moral.
Un desenlace estupendo e inesperado con el que el autor sorprende al lector inevitablemente.